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Descubre los vinos del Valle de Napa en California del conocido director Francis Ford Coppola, elaborados con el mismo arte y calidad que sus películas.
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Vinos almacenados a temperatura controlada.
En 1995 el conocido director de cine Francis Ford Coppola, adquirió la propiedad denominada Inglenook Chateau y los viñedos cincunvecinos en el Valle de Napa y fundó la Niebaum-Coppola Estate Winery. Dentro de la bodega se encuentra el Centennial Museum donde se explica la historia de las dos familias que han creado la bodega, por un lado Gustave Niebaum ---un finlandés que hizo fortuna en Alaska---, quien fundó una gran bodega vinícola capaz de rivalizar con las de Francia, y la familia Coppola, integrada por ítaloamericanos, quienes mantuvieron vivo el sueño de destacar en el mundo de las artes cinematográficas.
La tradición vitivinícola en la familia Coppola se remonta a la época de la prohibición donde el abuelo de Francis elaboraba vino en Nueva York, un vino prohibido y de poca calidad, pero que despertó el interes y el amor por este mundo en el pequeño Coppola. Ahora Francis Ford Coppola disfruta con sus dos bodegas de vino y elabora caldos de gran calidad, premiados a nivel mundial.
Coppola Cabernet Sauvignon, es el clásico vino tinto californiano, suave y afrutado.
Influenciado por la idea de los jardines de Tivoli, una de las mayores atracciones del centro de Copenhague, Francis Ford Coppola creó su bodega.
"A menudo he sentido que la vida moderna tiende a separar todas las edades demasiado. Antiguamente, los niños vivían con los padres y los abuelos, y la unidad familiar era algo muy valioso".
Son palabras de Francis Ford Coppola sobre por qué se lanzó a hacer su sueño realidad. Quería convertir una bodega en un parque donde reunir a la familia y disfrutar de la vida.
"Así que cuando comenzamos a desarrollar la idea de esta bodega, pensamos que debería ser como un centro turístico, básicamente un país de las maravillas del vino, un parque de placer donde la gente de todas las edades puede disfrutar de las mejores cosas de la vida - la comida, el vino, la música, el baile. Un lugar con juegos, natación y actuaciones de todo tipo. Un lugar para celebrar y amar la vida".
Así lo había concebido, como un proyecto desde el que disfrutar y entregar elementos de disfrute a quien acuda a visitarlo. Y, quizás también, para recordar a su abuelo, que elaboró vino en tinajas ubicadas en un sótano de Nueva York.
Sus viñedos se ubican en la finca de Inglenook, en la zona de Sonoma, en el californiano valle de Napa, y de ellos se encarga el vinicultor Corey Beck, con más de 20 años de experiencia.
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